Se cumple una década de Administración Kirchner e InfoBae decidió hacer una encuesta entre economistas para elegir de una lista de 20, los 10 hitos que consideremos más importantes de la economía K.
Resulta difícil elegir 10 hitos de la década K en materia económica. Mucho más aún es elegir uno o dos entre esos 10. Pero los que primero vienen a mi mente, tal vez por lo emblemáticos, son la estatización de las AFJP y la intervención del INDEC. Ambos fueron de los primeros atisbos de una intervención estatal que resultaría creciente y ambos también mostraron tempranamente la vocación por no corregir los problemas de fondo del modelo, sino buscar atajos para cubrir el déficit fiscal y esconder la inflación, apostando siempre a que el paso del tiempo y el contexto internacional los resolvieran. Hoy asistimos a las consecuencias de esas primeras decisiones. El gasto público llegó a niveles récord históricos (de la mano de subsidios y de una política energética que cierra con importaciones también récord) y no puede financiarse sino con el balance del Banco Central. Sobran pesos, faltan dólares y se imponen restricciones por todos lados. Los problemas macro requieren de soluciones macro no micro. La inflación no es un tema sólo de expectativas o de regulación y de intervención de mercados. Es cierto, y ha quedado de manifiesto en estos años, que una buena dosis de poder político puede compensar la ausencia de una política económica adecuada. Con poder político las restricciones y los controles pueden generar los resultados buscados. Pero eso es verdad mientras la economía real funciona. Y con inflación alta y precios desequilibrados la economía real en algún momento flaquea y las correcciones macro postergadas finalmente deben realizarse. La década K pasará a la historia por el desprecio a la macro, la cual viene urdiendo su venganza.